Crónica de la Japan Expo 11th Impact + Comic Con Season 2

Imagínate un recinto de proporciones descomuncales, absolutamente abarrotado de frikis, tiendas, editoriales, expositores, etc. ¿Eres capaz de visualizarlo en tu mente? pues te diré que posiblemente lo que te estes imaginando no se acerque en lo más mínimo a lo que es la Japan Expo de París.

Pero empecemos por el principio, o sea, como llegar al lugar. Llegar al Parc d’Expositions es muy fácil ya que puedes ir tanto en guagua (autobus) como en tren. Nosotros cogimos el tren.

Para ir en tren tienes que coger el RER B dirección Charles de Gaule (ten cuidado porque algunos van directos al aeropuerto y no paran por el medio) y bajarte en la parada Parc d’Expositions (difícil ¿eh?), verás que no tiene pérdida, porque además el recinto está justo enfrente de la estación. Lo peor de llegar allí es tener que coger el transporte público. Yo no sé como funcionan las guaguas, porque no llegamos a coger ninguna, pero los trenes y metros por lo general van a reventar (el primer día tuvimos que dejar pasar dos trenes antes de que pudiéramos subiernos en uno, porque no cabía ni un alfiler) y si a eso le sumas que hacía un calor infernal y que no tiene aire acondiconado, ya te puedes imaginar como llegamos.

Una vez te bajas del tren y sales de la estación, lo primero que ves es un pequeño paseo cubierto, y al final, unas vayas donde hay dos chicos con unos megáfonos gritando en francés (idioma que no hablo más allá de oui, merci y bonjour) diciendo algo así como: "Los VIPS, prensa, expositores y afortunados tocados por la mano de Dios a la izquierda. El resto de los mortales a la derecha". Ya desde el principio se veía que aquello estaba muy bien organizado.

En la zona de la entrada general te encuentras con tres colas: una para los que no tiene entrada y deben comprarla, otra para los que tienen entrada de un día y otra para los que tienen el pase de 3 ó 4 días. Dependiendo del día y la hora a la que llegues tendrás que hacer más o menos cola y una vez has entrado si quieres salir no puedes volver a entrar. También existen unas entradas premium que te otorga algunas ventajas, como por ejemplo la de entrar al recinto más temprano, y es la entrada que deberías de tener si quieres conseguir seguro una firma de alguno de los invitados (ya explicaré porqué), pero que según tengo entendido, sólo se puede comprar en Francia y se acaban muy rápido.

Una vez dentro y pasado el hall de la entrada, te encuentras con esta estampa.

La foto no le hace justicia. Lo que puedes ver ahí sólo es la entrada y no muestra apenas nada del recinto. Si quieres ver el mapa completo de la Japan Expo puedes hacerlo aquí y aquí el de la Comic Con, porque aunque por los mapas y las webs no lo parezca, este evento es un 2 en 1. Imagínate si aquello era grande, que en los tres días que estuve (porque el viernes lo usamos para hacer turismo) no me dio tiempo de verlo todo. Es más, Tor estuvo hablando con Carlos Pacheco, que era uno de los invitados de la Comic Con, y éste le dijo que aquello era más grande que la San Diego Comic Con.

Después de ver tiendas y más tiendas a la izquierda y editoriales y más editoriales a la derecha, me di cuenta de que los franceses lo tienen tooodo editado. Los mangas con calidad de papel en general inferior a los españoles, pero por lo poco que me fijé con precios bastante buenos (por ejemplo "Aishite Knight", o "Bésame Licia" como se llamó en España, tenía 300 páginas y costaba 9€ y no me lo compré porque no hablo francés) y los animes con ediciones sencillas y otras más cuidadas a precios de risa. Además había toda clase de merchandising para todos los gustos a precios varios, los cuales algunos estaban muy bien y otros eran un atraco a mano armada. Si te gusta comprar originales, ándate con ojo, porque había mucha copia china y lo peor es que te lo vendían a precio de originales japoneses.

Además de las zonas de tiendas y editoriales, había una extensa zona de fancineros, donde dibujantes noveles vendían sus cómics, ilustraciones y merchandising y justo al lado, una zona de creadores en la que podías comprar principalmente ropa y complementos de diferentes estilos.

Para terminar con la zona de la Japan Expo en si, y como no podía ser de otra manera, también había una parte dedicada a la cultura japonesa. En esta zona había stands de toda clase, tiendas, organismos oficiales, stands promocionales... un lugar muy interesante, en el que incluso podías llegar a degustar algunos platos típicos de la gastronomía japonesa recién preparados. También había demostraciones de artes marciales donde en algunas ocasiones los propios visitantes podían subirse al "tatami" para aprender la bases y además, esta zona contaba con su propio escenario en el cual se hacían exhibiciones de distintas artes japonesas y se daban charlas.

Conforme te acercabas a la zona de la Comic Con, empezabas a ver Stands de grandes compañías como eran Bandai, Sega o Warner, presentando sus últimas novedades y en algunos casos dando regalitos de promoción como paipais (los cuales se agradecían enormemente) o bolsas de tela.

La verdad es que la parte de la Comic Con estaba bastante mal organizada. Quitando las exposiciones y los stands importantes, todo parecía estar muy desordenado y mal colocado e incluso la zona de firmas era de risa (aunque técnicamente tenían una zona mejor preparda, pero la mayor parte del tiempo la ocupaban los invitados de la Japan Expo). Es una de las pocas cosas negativas que puedo decir sobre el evento, pero puesto que la Comic Con es el segundo año que se hace, supongo que de momento se les puede perdonar.

Como no se puede salir del recinto (y aunque pudieras, por los alrededores parece ser que no hay nada), a la hora de comer tienes dos opciones: traerte la comida de casa o comer en uno de los varios restaurantes y chiringuitos que hay en recinto. La comida de dentro está buena, pero en general es cara (comer en París es caro). El primer día, como no tuvimos tiempo de nada, comimos en un puesto de takoyakis, estaban muy ricos, pero nos costaron 6 bolas 9€ si mal no recuerdo y sin bebida.

En cuanto a cosplay había de todo, o sea, cosplays muy cutres, cosplays normales y cosplays muy buenos, sin embargo el mimo y cariño que se le da al cosplay en este evento, nada tiene que ver con el de otros eventos españoles a los que he asistido.

Para empezar, había una zona llamada 100% cosplay donde tenían un escenario única y exclusivamente para actividades relacionadas con cosplay. En este escenario se realizaban actividades lo largo de todo el día de manera ininterrumpida, las cuales iban desde simples desfiles donde la gente se subía de forma expontanea al escenario a posar, hasta pequeños concursos temáticos. En la misma zona y a la derecha del escenario había instalados unos vestuarios libres para que cualquiera pudiese cambiarse y en la parte trasera había otros vestuarios que eran exclusivos para los participantes de los concursos oficiales dónde además, podían dejar sus cosas. Por último, en la parte izquierda, había dos stands de fotografía, además de algún que otro "stand ambulante", como un grupito de chicas de japonesas que iban con sus cámaras, focos y paraguas y que al parecer eran de la Cosmode.

Pero si algo me impresionó de verdad es ver donde se celebraban los concursos oficiales de cosplay. Tras pasar un pequeño hall y un pasillo acristalado, llegas al escenario principal que está instalado en un recinto que me atrevería a decir que es casi tan grande como la Farga de Barcelona. Es entrar y ponérsete cara de tonto porque no te crees lo que estás viendo. El recinto está totalmente a oscuras porque tiene todos los paneles de cristal cubiertos y al fondo hay un escenario de unas dimensiones más o menos normales, pero con unas infraestructuras totalmente fuera de lo esperado para alguien que nunca ha estado allí. El escenario está preparado para que no veas lo que pasa detrás de él, por decirlo de algún modo, es como el de un teatro sólo que sin telón. A ambos lados hay pantallas gigantes, que sumada a una tercera que se encuentra detrás de la torre de control, ayudan a que no pierdas detalle de lo que está pasando aunque estés lejos. El escenario cuenta con una larga pasarela y además con un juego de luces que a mi me dejó flipándolo, porque los montajes de los participantes se hacían a oscuras y eso mantenía la intriga, porque las luces le daban un toque muy especial a las actuaciones y porque las fotos, a pesar de estar a oscuras, salían muy bien.

Pero no sólo la parte de cara al público (que por cierto, hay asientos y pasillos por los que poder moverte si necesitas salir urgentemente) es diferente a como se hace en el Salón del Manga de Barcelona (y pongo este ejemplo en concreto, porque se supone que el buque insignia de los eventos españoles de manga y que debería de dar ejemplo, pero no lo hace), sino que por el lado de los participantes también es distinto. Para empezar, los participantes nunca están expuestos al público, nada de estar en una fila en un lado del pabellón con todo el atrezzo apretujado para que quepan todos, ni intentando hacer malabarismos para no ir tropezándose con los demás cosplayers, no, ellos tienen su propia entrada al recinto y permanecen en todo momento en la parte trasera del escenario dónde hay capacidad más que suficiente para albergarlos a todos sin problemas y estar más o menos cómodos. Además, hay instalados vetidores, espejos con luces para maquillarse, dos pantallas para ver que está pasando sobre el escenario y mesas con algunas chucherías y bebidas para que a los participantes no les de un telele mientras esperan (de hecho, casi siempre hay alguien de la organización ofreciéndote algo de beber).

En fin, que en España queda mucho por aprender a este respecto.

Y bueno, si hablamos de aprender, irremediablemente hay que hablar de los invitados, porque en la Japan Expo si que hay invitados de verdad, de esos de los que casi todo el mundo ha oido hablar y que no son el "Ayudante de Producción del Anime Y".

Básicamente hay dos tipos de invitados, los que trae la propia organización y los que traen las editoriales y algunos stands. Hay mangakas, directores, animadores, músicos, etc., una larga lista en la que seguro hay alguien que te interesa. Sí quieres consultar la lista completa de este año puedes hacerlo aquí.

Cómo artistas destacados (los Guests of Honor) este año estaban:
  • Tsukasa Hojo: El mejor mangaka del mundo mundial, porque lo digo yo y punto.
  • Noriyuki Iwadare: Compositor de bandas sonoras de videojuegos.
  • Morning Musume: El mítico grupo de Idols.
  • Hideo Kojima: El creador del "Metal Gear Solid".
  • Kenji Kodama: El encargado de animes como "City Hunter" o "Cat's Eye".
Además había otros invitados como Masakazu Katsura, dos componentes de X-Japan, Hiro Mashima... Pero es que la Comic Con tampoco es que se quedase atrás, porque contaba con gente como Jeph Loeb (el Guest of Honor, que a última hora no pudo asistir porque lo nombraron director de Marvel Televisión o algo así), David Lloyd (el dibujante de "V de Vendetta" que me hizo un dibujo muy chulo), Carlos Pacheco (que le hizo un dibujo a Tor de Linterna Verde que estaba increble), Frank Quitely...

En mi caso, el motivo por el que me di este viaje fue, como ya sabrán algunos, para ver a Tsukasa Hojo. Qué grande, qué emoción verlo dibujar en vivo y en directo y que pena no haber conseguido su firma y es que el tema de las firmas en la Japan Expo es un mundo aparte.

Conseguir una firma depende de quién haya traido al invitado.

Si es un invitado de la propia organización, hay dos tipos de firma: "First come, first served" y sorteo. El "First come, first served" es, como su nombre indica, "El primero que llega, el primero que se lo lleva" y aquí es dónde las entradas premium son importantes, ya que si tienes una de estas entradas, pordrás acceder al recinto más temprano. Si no tienes una entrada premium, tu única oportunidad es probar suerte en el sorteo (porque te aseguro que antes de que hayan abierto las puertas ya se han acabado las del otro tipo). El sorteo consiste en meter la mano en una caja llena de papelitos y si te toca uno que dice Gagnant, te darán un ticket que te acredita como uno de los afortunados, en el que aparece el nombre del invitado y la hora de la sesión de firmas. Yo no tuve suerte y no conseguí la de Tsukasa Hojo (snif, snif), pero si que me llevé la de Kenji Kodama (algo es algo).

Si el invitado ha venido a través de una editorial o stand, son ellos los que ponen sus propias condiciones. Normalmente te obligan a comprar algo y en el caso de las editoriales a veces esa compra a lo que da derecho es a entrar en un sorteo (o sea, que puede que te gastes el dinero para nada), es más, por lo general ni siquiera te dejan sacarles fotos y de hecho, algunas editoriales tenían en sus stands unos lugares especiales tapados para las firmas.

Aunque es posible que me esté dejando muchas cosas por el camino, voy acabar aquí. Sólo puedo decir que he disfrutado muchísimo este evento, que sin duda ha merecido la pena viajar hasta París y que ojalá algún día pueda repetir.

3 comentarios:

Rydia dijo...

Pedazo reportaje! Me ha dejado sin palabras. Ojalá pudiese ir algún día, se ve impresionante. Las tiendas, el gran espacio que hay, invitados, el tema del cosplay, todo! Que suerte tienen los franceses de tener un evento así.

Una pena que no pudieras conseguir firma de Tsukasa Hojo, pero al menos tienes un dibujo del autor de V de Vendetta. Adoro a ese hombre *-*

Lana Drown dijo...

¡Qué envidiaaa! Tiene que haber sido superdivertido. Ahora el salón de Tenerife te parecerá una broma, jajaja.

Nerya dijo...

¡Que Salon mas interesante! Y has hecho un reportaje bastante bueno...

Me gusta tu blog, te sigo! :)

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